Hace ya más años de los que parece, nuestras televisiones eran dispositivos que solo usábamos para ver las cadenas de televisión o disfrutar de algún dispositivo conectado. A medida que la tecnología ha evolucionado, este tipo de televisiones dejaron paso a las Smart TV, dispositivos que ampliaron ese concepto hasta el punto de que son capaces de muchas cosas sin necesidad de nada más. Bueno, de nada más no. Estas Smart TV tienen que estar conectadas a Internet, y si tienes la tuya por WiFi te damos razones de peso para que cambies a cable.
Todas las Smart TV prácticamente disponen de la posibilidad de conectarlas por WiFi a nuestro router, así como de un puerto Ethernet por si utilizamos cable. Mucha gente opta por el WiFi porque realmente es mucho más cómodo, pero esto puede ser un error bastante grave, especialmente si tienes la televisión al lado del router. Sea cual sea tu caso, aquí tienes 6 razones para quitarle el WiFi a tu tele.
La estabilidad de tu conexión será peor
No tenemos ningún pensamiento de criticar a las redes WiFi, ya que es una solución genial para muchos casos. Sin embargo, las características de estas hacen que, en términos generales, estén muy por debajo de las conexiones por cable, y en uno de los puntos donde más hay diferencia es en la estabilidad de conexión.
Es cierto que estos problemas de estabilidad se solucionan bastante si nuestros dispositivos son compatibles con WiFi 6, pero hasta la fecha solo lo son los modelos más recientes. Además, si tenemos muchos dispositivos conectados a nuestra red WiFi es casi seguro que vamos a tener problemas de estabilidad, no solo en la Smart TV, sino también en los demás.
Si hablamos también de latencia, tampoco hay color entre el WiFi y el cable. Ambas maneras de conectarnos a Internet van a tener latencia, pero la que tendremos por WiFi será mayor que la del cable el 100 % de las veces.
El cable siempre es más rápido
Otro punto muy a tener en cuenta entre ambas maneras de conectar nuestras televisiones es otra gran diferencia entre ellas. Estamos hablando de la velocidad de conexión, y es que realmente el cable es la única forma que tenemos de aprovechar al 100 % nuestra conexión.
Hay que tener en cuenta que muchas operadoras ya están ofertando conexiones muy potentes como de 1 GB, y para poder aprovechar la conexión a tope necesitaremos que nuestra tele tenga un puerto Gigabit. Pese a ello, no hay color entre WiFi y cable en lo que a conexión se refiere.
Aprovechar la velocidad que tenemos se vuelve a cada vez más importante. Las plataformas de streaming ya emiten su contenido (o al menos, parte de él) en 4K, y para ello necesitamos tener una conexión rápida o estable, puesto que de lo contrario sufriremos cortes cada poco tiempo.
¡Cuidado! Tu WiFi podría no ser seguro
Uno de los máximos quebraderos de los fabricantes de routers siempre es proteger sus creaciones lo máximo posible de cualquier tipo de ataque. Esto, casi en el 100 % de los casos, se centra en el WiFi, ya que es la forma más fácil que tienen los ciberdelincuentes de atacar nuestra red.
Los routers más modernos ya cuentan con el protocolo de seguridad WPA3 (que es mucho más seguro que los anteriores), pero hasta este tiene fallas de seguridad. Sí tenemos nuestra tele conectada por WiFi al router habrá más probabilidades de sufrir ataques en ella.
El cable, por otro lado, es mucho más aseguro. Obviamente, no se puede decir que sea inexpugnable, pero sí que se puede afirmar sin lugar a duda que existe una brecha de seguridad entre ambas conexiones que no se puede pasar por alto.
Mayor probabilidad de interferencias
Otro de los problemas que puedes tener al usar tu tele por WiFi es sufrir interferencias de todo tipo. Las conexiones WiFi dependen de una serie de canales que tiene tu router, y estos además de aceptar un número determinado de conexiones, también pueden provocar interferencias.
Aunque esto te puede ocurrir en una vivienda unifamiliar, el verdadero problema lo puedes tener si vives en un bloque de pisos. Si en tus proximidades hay muchos equipos emitiendo señal WiFi va a ser muy probable que tengas interferencias cada poco tiempo, y es algo a lo que apenas le puedes dar solución.
Las soluciones inalámbricas son más caras
Como hemos dicho antes, es bastante probable que tu televisión principal esté en tu salón al lado del router, por lo que la conexión por cable debería ser tu opción número uno. Pero, ¿y si tienes otra u otras televisiones en casa?
Aquí se puede admitir que al tener la televisión alejada del router la opción número uno siempre debe ser el WiFi, pero no tiene por qué. Generalmente, al tener la televisión lejos necesitamos de alguna solución para extender la cobertura, ya sean repetidores WiFi o una red de malla. Si hablamos de utilidad está claro que no hay color, aunque si buscamos un producto de calidad puede que nos salga muy caro.
Un buen cable de Internet siempre va a ser mucho más barato que cualquier solución de calidad que puedas comprar. Es cierto que depende de la distribución de tu casa o la instalación que tengas puede ser un engorro, pero incluso llamando a un instalador es posible que te ahorres un dinero ganando calidad de conexión para tu tele.
Fuente obtenida de: https://www.adslzone.net/noticias/redes/5-razones-no-conectar-tele-wifi/