La domótica puede ayudarnos en muchos aspectos de nuestro día a día. Esto incluye también ahorrar en la factura de la luz, gas o agua. En este artículo vamos a hablar de este último caso. Vamos a explicar por qué tener una casa domotizada puede ser muy útil para gastar menos agua y de qué forma puede ayudarnos. Verás que hay usos distintos que puedes aplicar en tu vivienda para que también sea más sostenible.
Usos de la domótica para ahorrar agua
Tener una vivienda inteligente es algo que está cada vez más presente. Podemos encontrar dispositivos muy variados y, aunque al principio pueda ser una inversión importante, a la larga pueden ayudarnos a ahorrar dinero. Es el caso también del consumo de agua, ya que podemos disminuirlo fácilmente con algunos aparatos.
Detectar fugas
El primer uso que puedes darle a la domótica del hogar para ahorrar agua es utilizar sensores que van a detectar fugas. Puede que algún aparato, como puede ser por ejemplo una lavadora, esté soltando agua y no lo sabes. También alguna tubería que esté rota, la calefacción, etc. Si no detectas este problema, aunque sea poco puede que estés derrochando agua cada día.
Los sensores de fugas de agua van a detectar este problema y lanzar un aviso para que tomemos medidas lo antes posible. Básicamente actúan igual que un detector de humo, de movimiento o similares.
Sensores inteligentes en los grifos
También puedes instalar sensores inteligentes en los grifos. Van a ayudarnos tanto a ahorrar agua como también a ganar en comodidad. Piensa, por ejemplo, cuando estás cocinando y tienes que lavar continuamente alimentos. Tienes que encender y apagar el grifo constantemente y a veces puede que lo dejes encendido varios segundos, aunque sea de forma inconsciente.
Estos sensores lo que hacen es activar el flujo de agua en cuanto detecta la mano. De esta forma solo se enciende el tiempo necesario y no vamos a derrochar agua sin necesidad. Es una medida interesante también para ahorrar en la factura cada mes.
Sistema de riego inteligente
Puedes ahorrar agua también con un sistema de riego inteligente. No solo va a permitir que te olvides de regar tus plantas, por ejemplo si vas a estar de vacaciones unas semanas; también es muy útil para optimizar el riego y no desperdiciar agua. Por ejemplo, puede detectar la humedad del suelo y saber cuándo y cuánto regar.
También puede saber en función de la temperatura si conviene o no regar una planta. Puedes crear diferentes programas, seleccionando una cantidad de agua. El objetivo es evitar regar más de lo necesario, tanto por salud de la planta como también por ahorrar agua. Además, hay sistemas que detectan la lluvia y evita que ese día se riegue el césped o las plantas.
Temperatura de la ducha
Otra ventaja de tener una vivienda domotizada y poder ahorrar agua es que podemos configurar una temperatura estable para la ducha. De esta forma evitamos que salga agua fría al principio, al menos disminuir lo máximo posible que esto ocurra, y evitar que se desperdicie en los meses de invierno.
De esta forma podrás ducharte con agua a buena temperatura, la que hayas programado, y poder ahorrar. Hay algunos dispositivos que permiten configurar también el tipo de caudal, para que no salga más agua de la realmente necesaria.
Sistema de reciclaje de agua
No toda el agua que gastamos puede desperdiciarse para siempre. Existen sistemas de reciclaje de lo que se conoce como aguas grises que permite reutilizarlas. Por ejemplo, podemos volver a usar el agua del lavabo para, posteriormente, someterlo a un proceso de reciclaje y que esa agua sirva para regar el jardín o para la cisterna del váter.
De esta forma también podemos ahorrar agua y gracias a la domótica podemos lograrlo. Al final, la suma de muchas cosas puede hacer que logremos resultados importantes en nuestro objetivo de gastar menos agua en casa.
En definitiva, como ves es interesante utilizar la domótica también para ahorrar agua en casa. La podemos usar en nuestro día a día para hacer que la factura disminuya y al mismo tiempo colaborar en tener una vivienda más sostenible.
