El microondas no solo sirve para calentar comida, sino que también lo podemos usar para descongelar alimentos. De hecho, vas a encontrar una opción justo para esto en muchos modelos. Ahora bien, ¿es buena idea de cara a intentar ahorrar energía? Vamos a contarte un truco aún mejor, aunque verás que no es precisamente para impacientes. Pero si quieres ahorrar en la factura de la luz, es una buena solución.
Descongela alimentos en el frigorífico
Hay un término que se llama inercia térmica. Es básicamente aprovechar la inercia cuando algo empieza a bajar o subir la temperatura. Por ejemplo al apagar la calefacción, la inercia térmica permite que aguante un tiempo la casa antes de que esté fría y tengas necesidad de volver a encenderla. Algo similar podemos decir de un alimento que está congelado y empieza a descongelarse.
Ese alimento que tienes en el congelador, va a desprender frío. Si pones la mano muy cerca, verás que sientes la baja temperatura. Lo que hacemos por comodidad es meter ese alimento en el microondas, marcar la función de descongelar y esperar unos minutos hasta que está listo para comer. Pero claro, eso va a hacer que el microondas gaste energía y, además, habremos desaprovechado el frío que desprende ese alimento congelado.
¿Qué podemos hacer en vez de descongelarlo en el microondas? Lo que puedes hacer es simplemente meterlo en el frigorífico. Sí, meter ese alimento en el frigorífico para que empiece a descongelarse. Lógicamente es un proceso mucho más lento. Por ejemplo tendrías que ponerlo la noche antes.
Con esto lo que conseguimos es aprovechar esa inercia térmica. Vamos a aprovechar un alimento congelado, que desprende frío, para que el frigorífico tenga que gastar menos recursos en mantener la temperatura baja. Igual que decimos que meter un alimento caliente en el frigo es un error porque va a gastar más, con esto logramos lo contrario.
No solo vas a ahorrar electricidad al no tener que utilizar el microondas, sino que además conseguirás que el frigorífico gaste al menos, aunque sea muy poco, durante ese proceso. A fin de cuentas, cualquier pequeño gesto ayuda a ahorrar en la factura de la luz.
Los electrodomésticos eficientes también ayudan a gastar menos
Este ahorro será mayor o menor en función de cómo sea el electrodoméstico que utilices. Es posible que en tu caso tengas uno muy antiguo, de gran consumo, y la diferencia sea mucho mayor que si tienes un modelo más reciente, más optimizado y que va a utilizar menos electricidad para descongelar.
No obstante, nuestro consejo es que siempre utilices electrodomésticos eficientes. En caso de que tengas alguno muy antiguo, piensa en cambiarlo y poder así ahorrar en tu factura de la luz. Además, los más recientes los vas a poder gestionar también de forma remota, siempre y cuando tengas Internet en toda la casa y puedas aprovechar el Wi-Fi.
Por tanto, como ves es posible ahorrar luz, aunque sea un poquito, al descongelar alimentos. En vez de usar el microondas, que es lo que sin duda va a consumir más electricidad, aprovecha la inercia térmica y déjalo descongelando en el frigorífico la noche antes.