Utilizar una VPN es muy interesante en determinadas circunstancias, como por ejemplo al navegar desde redes públicas, cuando estamos de viaje o si necesitamos entrar en una página que solo funciona en otro país. Tenemos muchas opciones para instalar un programa VPN, tanto gratuitos como de pago. Pero en este artículo te vamos a contar las ventajas y desventajas de usar tu propio servidor VPN. ¿Realmente es útil?
Usar tu propio servidor VPN, una opción
¿Qué es eso de tener tu propio servidor VPN? Básicamente es no depender de un servicio externo, sino que vas a configurar un dispositivo de tal manera que puedas conectarte de forma remota a él y crear un túnel cifrado. Esto es interesante si por ejemplo necesitas navegar con la IP de casa o de una oficina.
Tienes varias opciones para ello. Una de ellas es usar un router que tenga servidor VPN integrado. No todos los traen, por lo que deberás conocer si el tuyo en concreto dispone o no de esta opción. Si te lo ha dado tu operadora, es muy probable que no tenga compatibilidad y debas usar otro distinto.
Otra opción es que uses una Raspberry Pi o miniordenador. En el sistema operativo vas a poder instalar un software, abrir el puerto correspondiente del router y configurarlo para que puedas conectarte desde el móvil o desde el PC, sin importar dónde te encuentres.
Ventajas
Una de las ventajas claras es que no vas a depender de ningún servicio externo. No vas a tener que instalar alguna VPN como pueden ser ExpressVPN o NordVPN. Simplemente tienes la tuya propia y listo, no dependes de terceros servicios que puedan ser un problema.
Esto nos lleva a la segunda ventaja, que es el precio. No vas a tener que contratar ningún servicio. Si queremos que funcione bien, con buena velocidad y además sea seguro, las VPN gratuitas no son una buena opción. Como vas a crear tu propio servidor VPN, vas a tener todo eso pero sin necesidad de pagar nada.
También vas a poder tener un mejor rendimiento. Eso sí, vas a depender de posibles cuellos de botella y límites. Por ejemplo, si usas un router antiguo de ADSL, la velocidad va a estar limitada a unos 20-25 Mbps que es la capacidad máxima de subida que van a tener. En cambio, si es un router moderno y además es Gigabit Ethernet, vas a poder pasar de 100 Mbps sin problemas e incluso varios cientos si la conexión lo permite.
Desventajas
Pero crear tu propio servidor VPN tiene también inconvenientes. Uno de ellos es que requiere de conocimientos para configurar un router o convertir una Raspberry Pi. Tal vez para ti no sea un inconveniente esto que comentamos, pero para muchos usuarios sí que puede echarlos para atrás y preferir simplemente contratar un servicio externo.
Otro punto negativo es que vas a depender de tener un aparato siempre encendido. Si tu router es compatible tal vez no pase nada, pero si tienes que utilizar una Raspberry Pi, por ejemplo, ahí tienes que ver si te interesa tener otro aparato conectado. Además, en caso de cortes de luz vas a perder la conexión.
También podemos hablar del coste para ponerla en marcha. Es cierto que una buena VPN que contrates también va a costar dinero, pero si únicamente la necesitas para algo puntual te saldrá mejor. Si tienes que comprar un router o una Raspberry Pi (que además están mucho más caras actualmente) es una inversión a tener en cuenta.
En definitiva, tener un servidor VPN es una opción que puede ser interesante para algunos, pero no tanto para otros. Con estas ventajas y desventajas que hemos descrito puedes hacerte una idea de si realmente te compensa o es mejor que uses un servicio externo.
