Fue el pasado jueves cuando empezaron unos reportes inusuales
sobre PC de todo el mundo que sufrían pantallazos azules
constantes. Estos ordenadores quedaban totalmente inoperativos, ya
que no podían iniciar y funcionar de forma habitual, quedándose
bloqueados. No parecía haber ninguna solución definitiva, hasta que
finalmente Microsoft decidió lanzar una herramienta de recuperación
oficial. Esta iba a ser la solución para poder hacer
que funcionen los 8,5 millones de PC afectados, pero no quiso
acabar ahí. Microsoft también anunció que la UE fue la culpable de
que CrowdStrike provocase este caos, debido a que le proporcionó las claves del kernel
de Windows.