Hay muchos factores que pueden ayudarte a pagar menos en la factura de la luz. Puedes realizar algunos cambios o ajustes y lograr consumir menos. En este artículo te vamos a hablar del microondas y por qué usarlo más puede ser muy útil de cara a pagar menos en la factura de la luz. También te daremos algunas recomendaciones para intentar reducir el consumo lo máximo posible.
Usar más el microondas ayuda a ahorrar
En muchas ocasiones podemos utilizar diferentes electrodomésticos para cocinar. Un ejemplo claro es poder calentar algo tanto en el horno como en el microondas. Lógicamente habrá momentos en los que convenga más usar uno u otro. Pero si hablamos de ahorrar energía, el microondas es el más eficiente. Va a consumir menos a la hora de calentar si lo comparamos con el horno.
Según un informe realizado por el Instituto de Investigación Tecnológica del que nos hacemos eco, usar el microondas en vez del horno cuando sea posible nos permite ahorrar más de 20€ anuales en la factura de la luz. Esto puede ser más o ser menos en función de varios factores como el modelo del microondas y del horno, así como las veces que lo usemos.
Por tanto, utilizar el microondas siempre que sea posible en vez del horno nos ayuda a pagar menos en la factura de la luz. Esto será un granito más de arena dentro de todo lo que podemos hacer para pagar menos y consumir menos electricidad en nuestro día a día. Pequeños gestos o cambios pueden ser muy útiles.
Ahora bien, algo que debes tener en cuenta es que el microondas no gasta menos luz que un horno, sino que aprovecha mejor el tiempo. Esto significa que va a funcionar durante menos tiempo para conseguir lo mismo que el horno. Por tanto, para el objetivo de calentarla comida consume en total menos, aunque como electrodoméstico encendido el mismo tiempo no es así.
Otros consejos para ahorrar con el microondas
Un consejo básico para gastar menos electricidad al utilizar el microondas es que no lo dejes en Stand By. El consumo fantasma puede representar incluso un 10% del total de la factura. Cosas como el reloj del microondas encendido siempre van a formar parte de ese consumo fantasma. Un pequeño gesto como apagarlo siempre puede ayudarte a ahorrar.
También es importante que calcules bien cuánto tiempo realmente necesitas usarlo para calentar la comida, un vaso de leche o lo que sea. Eso te ayudará lógicamente a reducir el consumo y no desaprovechar energía. Mientras menos tiempo esté encendido, mejor para nuestro bolsillo.
Si descongelas alimentos en el microondas, una buena idea es evitar hacer eso. Lo que puedes hacer es descongelarlos al aire libre, aunque tarde más tiempo, o incluso en el frigorífico y aprovechar la inercia térmica para ahorrar en la factura de la luz de ese modo. Como al descongelarse los alimentos desprenden frío, el frigorífico se aprovecha de ello y consume menos energía para enfriar.
En definitiva, como ves utilizar el microondas en vez del horno siempre que puedas puede ayudarte a ahorrar en la factura de la luz. También podrías controlar estos aparatos con un enchufe inteligente, aunque debes evitar tener cortes en el Wi-Fi.