Es importante ventilar la vivienda, pero tampoco interesa que eso suponga un aumento del consumo eléctrico. Especialmente en invierno, en días fríos, debes tener cuidado en este sentido. Por ello en este artículo vamos a hablar de qué debes tener en cuenta al ventilar tu casa y no cometer errores. El objetivo es que no se dispare la factura eléctrica y no pagar más de lo necesario cada mes.
Errores al ventilar la casa
Al ventilar la casa vamos a reducir el nivel de humedad interior, algo importante a nivel de salud pero también de cara a mejorar la eficiencia de algunos electrodomésticos, como es el caso de la calefacción. Es algo que debemos hacer durante todo el año, pero en los meses de invierno puede suponer un descenso brusco de la temperatura de la vivienda. ¿Qué hacer para evitar consumir en exceso?
Ventilar a cualquier hora
Algo clave es elegir muy bien las horas en las que vas a abrir puertas o ventanas. Lo que vamos a buscar con esto es que el cambio de temperatura no sea tan marcado. No queremos que la vivienda baje rápidamente de temperatura, ya que luego nos costará más volver a calentarla, con lo que eso supone en la factura.
Nuestro consejo es que elijas las horas cercanas al mediodía. Normalmente es ahí cuando mejor te va a venir de cara a ahorrar. Es cuando la temperatura exterior puede ser mayor, suele entrar sol por la ventana y, en definitiva, el contraste térmico va a ser inferior. Evita ventilar la casa a primera hora del día o por la tarde, por ejemplo.
Pasarte de tiempo
También debes tener en cuenta cuánto tiempo ventilar. Claro, mientras más tiempo tengas las ventanas y puertas abiertas mayor será el consumo. No queremos pasarnos sin ser necesario, ya que eso significaría pagar más en la factura de la luz y desperdiciar energía cada vez que ventilamos la casa.
Entonces, ¿cuánto tiempo ventilar la vivienda? Lo ideal es que no lo hagas durante más de 10 minutos. Realmente no es necesario. Intenta así mantener la temperatura lo máximo posible para ahorrar en la factura de la luz.
Tener encendidos el aire, estufas o calefacción
Por supuesto, un error que debes evitar siempre es ventilar la vivienda con la calefacción encendida. No tiene sentido y es algo que va a hacer que derroches energía. Pero incluso no debes ventilar justo después de apagarla, por ejemplo. Lo que debemos buscar es mantener una buena temperatura.
Si vas a encender la calefacción, lo mejor es que antes hayas ventilado la casa. De esta forma podrás aumentar la temperatura y lograr que se mantenga también en la medida de lo posible cuando la apagues hasta el día siguiente.
No aprovechar el aislamiento térmico
Siempre puedes aprovechar el aislamiento térmico, como ventanas, persianas, etc. Eso te ayuda a mantener la temperatura. Ahora bien, ¿por qué también puede ser útil para ventilar la vivienda? Puedes subir las persianas y abrir ventanas en los momentos del día en los que haga más calor y cerrar todo una vez se va el sol.
De esta manera vas a poder guardar mejor la temperatura, pese a que hayas ventilado. Puedes poner la calefacción después de ventilar y que se mantenga la inercia térmica más allá de la tarde, cuando la vuelvas a apagar.
Ventilar habitaciones sin calefacción
Algo que debes tener en cuenta es la posible diferencia de temperatura entre habitaciones. Tal vez tengas alguna habitación sin los radiadores encendidos, porque directamente no la usas y quieres ahorrar. Pero si vas a ventilar la vivienda, o más concretamente esas habitaciones, es importante que no mantengas la puerta abierta con el resto de la casa.
El objetivo en este caso es evitar que haya un flujo de aire frío al resto de la vivienda que tiene mayor temperatura. Eso evitará que el resto de la casa se enfríe más de lo necesario.
Como ves, es importante ventilar la vivienda pero también hacerlo correctamente. Evita derrochar energía al permitir que se enfríe en exceso. No cometas estos errores de los que hemos hablado y podrás ahorrar en la factura de la luz cada mes. Además, siempre que no se desconecte el Wi-Fi en esa zona vas a poder utilizar la domótica para controlar mejor la calefacción.